miércoles, 30 de junio de 2010

KICK-ASS de Matthew Vaughn


Título: Kick ***
Director:
Matthew Vaughn
Intérpretes:
Aaron Johnson (Dave Lizewsky/Kick ***), Chloe Moretz ( Hit Girl), Cristopher-Mintz Plasse (Chris D'Amico/Bruma Roja), Nicolas Cage (Big Papi), Mark Strong(Frank D'Amico)
Año:
2010
Calificación(sobre 10):
7

El cine de superheroes es, actualmente, uno de los géneros que más dinero genera, y también uno de los mejor recibidos por el público. Aunque se puede decir que el cine de superhéroes (superhéroes basados en el cómic) comenzó con el Superman de Richard Donner o con el Batman de Tim Burton, el modelo actual de película de superhéroes que se ha ido repitiendo a lo largo de los últimos años (y que ha permitido beneficios casi seguros para aquel que decide hacer una película de superhéroes) es el impuesto por el film Spiderman de Sam Raimi del año 2002. Según este modelo cualquier película de superhéroes que se plazca debe de tener un argumento claro y sencillo, unos héroes yvillanos pintorescos y a ser posible con un buen número de fans, debe aunar dosis de acción con toques humorísticos (siempre que sea necesario) y sobre todo, sobresalientes efectos especiales. Así en los últimos años han ido saliendo al mercado multitud de films de temática superheroica, algunas buenas, como la mencionada Spiderman y su secuela, Batman Begins, X-Men y su secuela o Iron Man; algunas regulares, como el Increíble Hulk, Los 4 Fantásticos o Iron Man 2; y mojones insufribles como El Castigador, Daredevil, X-Men: Lobezno o Spiderman 3.

El género de las películas de superhéroes, debido a los pingües bineficios que aseguraa el modelo descrito anteriormente , no se ve sometido a grandes cambios con regularidad, por lo que resulta un género muy poco original así como muy superficial, sin embargo, de vez en cuando, un director se plantea traer algo de frescura a este género del que, para que engañarnos, se podría sacar mucho más provecho, logrando películas de gran calidad y con un toque novedoso que las diferencia del resto de películas del género. El ejemplo más reciente y destacable es la genial, se mire por donde se mire, El Caballero Oscuro de Cristopher Nolan, en donde la profundidad de los personajes predominaba por encima de otros aspectos. En ese aspecto, KICK-*** representa un toque de frescura al género superheroico.

En KICK-***, se nos presenta la vida de Dave Lizewsky, adolescente americano, friky por excelencia, con índice cero de popularidad y éxito entre las chicas, que un día se hace la pregunta que cambiará su vida ¿por qué uno no puede hacerse un superhéroe?. Así pues, se enfunda en un traje de buzo verde e inicia una carrera como justiciero enmascarado. Sin embargo, pronto se verá inmiscuido en una venganza contra la familia mafiosa presidida por Frank D'Amico por parte de dos vengadores enmascarados que se hacen llamar Big Papi yHit Girl.
La película goza de todos los elementos típicos de una película de superhéroes, pero además va un paso más allá al centrarse en tratar dos interrogantes: ¿qué es lo que hace a una persona un superhéroe? y ¿cómo podría sobrellevar su vida un superhéroe?
El protagonista no tiene un origen como Spiderman o Hulk, simplemente se hace superhéroe en busca de una respuesta a la pregunta ¿por qué no puedo uno mismo ser un superhéroe?. Matthew Vaughn enfoca la película entera alrededor de esta pregunta.

El punto fuerte del film son sus pintorescos personajes, así como la mayoría de las interpretaciones de dichos personajes.
El primero es el protagonista, Kick-***/Dave Lizewsky, interpretado de manera correcta por Aaron Johnson, que cumple con lo exigido por su personaje, ni más ni menos, al igual que su alter ego Bruma Roja, interpretado por Cristopher Mintz-Plasse (en este punto hay que señalar el desagradable doblaje que acompaña a este personaje, que hace parecer al personaje una especie de retrasado mental, cosa que en realidad desde luego no es).

Luego tenemos rondando por ahí a Nicolas Cage, quien parece estar recuperándose un poco después del interminable número de interpretaciones de risa en películas nefastas,por poner algunos ejemplos tenemos Next, El motorista fantasma o Teniente Corrupto (XD, esta última es totalmente tóxica para el cerebro humano, absteneos de visionadla). De hecho, se considera que Nicolas Cage es uno de los actores cuya caché ha descendido más en picado en los últimos años, en lo que parece ser una carrera para que le revoquen el oscar que ganó por Leaving Las Vegas. Así debería celebrar que, en KICK-***, haya logrado tener la primera actuación que puede considerarse "buena" desde El Señor De la Guerra . Una vez más, Nicolas Cage parece un ser humano.

En toda película que se precie hay interpretaciones malas, interpretaciones regulares e INTERPRETACIONES con mayúsculas. En este caso tenemos dos candidatos luchando por el primer puesto, uno ya curtido en el mundo del cine y una nueva promesa que a mí, personalmente, me ha sorprendido.

El veterano es Mark Strong, actor británico que parece haber nacido para interpretar papeles de villano de manera sobresaliente, entre sus interpretaciones más recientes se encuentran la de Lord Blackwood, villano de Sherlock Holmes de Guy Ritchie o la de Godfrey, antagonista de Robin Hood de Ridley Scott (y una de las pocas cosas reseñables del film). En KICK-*** vuelve a interpretar un papel de villano, encarnando a Frank D' Amico, el mafioso objetivo de Big Papi y Hit Girl de la manera a la que nos tiene acostumbrados, sereno en todo momento y mostrando su furia cuando es necesario. Un villano como los de las películas de antaño. Buenísimo actor, de lo mejor del film.
La nueva promesa es Chloe Moretz, que interpreta de forma súblime para alguien de esa edad a Hit Girl. Un papel que le va como anillo al dedo y al que aporta una gran personalidad única, mostrándose sanguinaria a la vez que inocente que rompe con el tópico de los niños actores odiables. La mejor interpretación de la película para una actriz novel.

En resumen, una película destacable dentro del cine superheroico que aporta un toque de frescura a este género tan plano y repetitivo. Interpretaciones buenas como la de Mark Strong y Chloe Moretz comparten planos con interpretaciones normales y corrientes, nada novedosas, como las de Nicolas Cage (que parece estar recuperándose de su laaarga caída en picado) o la de Aaron Johnson. Buenos efectos especiales y escenas de acción hiperviolentos se aunan con momentazos del humor más negro. Un producto perfecto para pasar una buena tarde de cine.

RECOMENDADO para todos aquellos fans del cine de superhéroes, para aquellos que creen que este esta acabado, para fans de Mark Strong y en general para todos los que quieran pasar una buena tarde de cine palomitero

lunes, 21 de junio de 2010

EL SILENCIO DE LOS CORDEROS de Thomas Harris


Los Estados Unidos se hayan aterrorizados por las acciones de un asesino psicópata conocido como "Buffallo Bill" que se dedica a asesinar mujeres a las que posteriormente arranca la piel. Falto de sospechosos y sin pistas a las que agarrarse, los agentes del FBI dirigidos por Jack Crawford se encuentran desbordados. En medio de esta situación caótica, la joven estudiante de la Academia del FBI Clarice Starling es enviada a realizar una entrevista a un famoso psiquiatra y asesino convicto llamado Hannibal Lecter, autor de numerosos crímenes en los que acababa canibalizando a sus víctimas. El Dr. Lecter parece dar muestras de tener un interés especial en Clarice. Cuando Buffallo Bill secuestra a la hija de una senadora y el Dr.Lecter insinúa saber alñgo acerca de la identidad del asesino, Clarice Starling tendrá que enfrentarse a los depravados juegos mentales del Dr.Lecter para así poder dar con la identidad de Buffallo Bill y así atraparle antes de que este acabe con la vida de su víctima.

Los psicópatas es un tema que me interesa mucho, y no por el morbo que contienen sus historias, que tambien, sino porque es un tema muy complejo y, al día de hoy, indescifrable. ¿Que es lo que hace que alguien se vuelva un psicópata?, ¿Donde acaban el bien y el mal para una persona?, ¿De verdad un psicópata es consciente de la maldad de sus actos?, son preguntas que muchos especialistas han tratado de resolver a lo largo de los tiempos, y que siguen sin respuesta, porque los mecanismos que actúan en la mente humana son tan complejos que resulta imposible intentar averiguar algo sobre ellos.

¿Qué intento decir con esto?, pues que un psicópata es un personaje muy díficil de manejar, muy complejo y por varios motivos. Primero, debes de tener un psicópata que atraiga a la gente, el morbo, ese es el principal motivo por el que el público quiere oir hablar de psicópatas. Segundo, un psicópata no es un personaje cualquiera, tienes que inventarte un origen y un motivo por el cual comete sus acciones. Así pues, manejar a un psicópata es un tarea dificultosa, una tarea que Thomas Harris afronta con notables resultados.

En el Silencio de los corderos, Harris nos presenta una intriga policíaca donde cobran mucha importancia los distintos puntos de vista de los personajes, en especial los de los psicópatas Buffallo Bill y Hannibal Lecter, a la vez que se ofrece la visión de los acontecimientos por parte de la protagonista Clarice Starling, por parte de Jack Crawford e incluso por parte de Catherine Martin, la secuestrada por Buffallo Bill. Estos personajes son distintos a su manera, sin embargo tienen algo en común, todos y cada uno de ellos poseen el mismo nivel de complejidad.

Si en su anterior novela, "El Dragón Rojo", Harris nos presentaba al psicópata Francis Dollarhyde como un hombre cuyo aspecto físico le había ocasionado maltratos por parte de su familia así como el inicio de su obsesión por las pinturas del "Dragón rojo" de William Blake, sobre las que basaba sus asesinatos, en "El Silencio de los Corderos" el asesino, "Buffallo Bill", es el resultado de combinar las vidas de diversos psicópatas reales, como Ed Gein (que inspiró películas como Psicosis o La Matanza De Texas) o Ted Bundy, así como comparte rasgos con el personaje de Dollarhyde de la anterior novela de Harris. Sin embargo, mientras que con el "Dragón Rojo" el autor ahondaba en el tema de la doble personalidad, con "Buffallo Bill" se introduce en el campo de los trastornos ocasionados por problemas con la sexualidad. Aún con todos estos detalles, "Buffallo Bill" es un personaje muy complejo, un personaje que aún tras dos lecturas de la novela no he acabado de comprender...quizá sea esta la imagen que quiere dar el autor sobre el psicópata, la de una persona casi imposible de comprender.

Luego tenemos la otra cara de la moneda.Humanidad en todo su esplendor. Clarice Starling, una mujer guiada por todas las directrices por las que se debe guiar un ser humano: justicia, amor, etc...Sin embargo, vemos que como "Buffallo Bill", Starling tiene un motivo por el cual persigue al asesino de esa manera tan "obsesiva" se podría llegar a decir, y que ese motivo además posee un origen. A mi parecer este es el dato más interesante que podemos obtener de la novela, que todos los seres humanos, seamos policías justos o asesinos en serie tenemos unos objetivos en la vida que guían nuestros actos, y dichos objetivos como cualquier cosa han de tener un origen. Creo que no hay frase que lo exprese mejor que aquella del Agente Smith en Matrix que decía:
"Es el objetivo lo que nos ha creado...el objetivo nos vincula, el objetivo nos motiva, nos guía, nos mueve, es el objetivo lo que nos define"

Y precisamente dentro de los límites que imponen estos objetivos que nos autoproponemos se mueve el psiquiatra Hannibal Lecter. EL personaje de la novela sin lugar a dudas. Más que un personaje es un esbozo de personaje, sus objetivos y desde luego su origen no quedan claros en absoluto ¿que es lo que busca Hannibal Lecter en la novela?, ¿Por qué?,¿el motivo de sus asesinatos?, todas preguntas sin respuesta. Sin embargo Lecter es el hilo conductor de todos los personajes del libro, él es el único que ve todo, que lo sabe todo, y que en última instancia tiene el control sobre todo.

Entre semejante tríada protagonista se mueven una serie de personajes más bien arquetípicos
que cumplen una función de rellenar huecos, más que otra cosa: está el mentor (Jack Crawford), la amiga (Ardelia Mapp), la víctima (Catherine Martin), etc

Al margen de los personajes, la novela está narrada con una prosa clara y más bien escasa de artificios, salvo por algunos juegos de palabras esporádicos, lo que hace de Thomas Harris un narrador normalillo a más no poder. No destaca para nada por su forma de escribir.

En resumen, Thomas Harris nos presenta una novela de suspense, con una trama muy bien hilada, unos personajes protagonistas sobresalientes acompañados por unos secundarios arquetípicos que el autor utiliza para intentar profundizar en la mente del psicópata, y hacer que el lector también lo intente. Sin embargo, la calidad de la novela habría mejorado si el autor hubiera mejorado un poco su estilo de escritura. A pesar de ello, "El silencio de los corderos" constituye un producto de lo más notable dentro de las novelas de suspoense. Un clásico de esos que nunca mueren.

RECOMENDADO a todos aquellos que deseen conocer a Hannibal Lecter, a los interesados en el tema de los psicokillers, y a los que no también, a los que hayan visto la película y quieran saber de donde surgió la historia del psiquiatra y en general, a todos los que quieran degustar uno de los mejores casos policiales jamás escritos de la historia.

jueves, 17 de junio de 2010

La Butaca: LA MUERTE TENIA UN PRECIO de Sergio Leone

Título: La Muerte Tenía Un Precio (For A Few Dollars More)
Director: Sergio Leone
Intérpretes: Clint Eastwood (El Manco), Lee Van Cleef (Coronel Mortimer), Gian Maria Volonté (El Indio), Luigi Pistilli (Groggy), Klaus Kinsky (El Jorobado)
Año: 1967
Calificación: (sobre 10): 9

Sergio Leone era un dios entre mortales, eso debería estar claro para todo el mundo a estas alturas de la existencia, debería enseñarse en los colegios. En vida nos dio algunas de las mejores películas de la historia del cine como Hasta Que Llegó su Hora o Erase Una Vez América, pero es sobre todo conocido por una trilogía conocida como "La Trilogía del Dolar" que pasaron a la historia por remodelar completamente la forma de hacer westerns. El cine del oeste ya no volvería a ser el mismo tras Sergio Leone, y eso lo ve uno claramente al ver estas tres joyas del cine: "Por un puñado de dolares", "El bueno, el feo y el malo" y la que hoy nos ocupa "La muerte tenía un precio".

En esta ocasión, Leone nos presenta a dos cazadores de recompensas, "El Manco" y el Coronel Mortimer, en busca de la misma presa: un sanguinario fugitivo conocido como "El Indio" por cuya cabeza ofrecen 10.000 dolares. Cuando ambos se vean superados por los acontecimientos deberán unirse para conseguir el ansiado objetivo.

Simple y directo, así es el argumento de la película. Y es que Leone no busca más, lo que hace es marcar un escenario concreto, una historia cerrada, sin finales abiertos, sin fisuras, en la que pueda hacer lo que mejor sabe, jugar con los personajes y sobre todo, con las imágenes, con las secuencias. Porque lo que marca la diferencia la diferencia entre un western de Leone y un western cualquiera es que, cuando en un western cualquiera alguien ejecuta un disparo decisivo tarda unos escasos segundos. Cuando alguien ha de realizar un disparo clave en una peli de Leone, el tiempo se detiene, los minutos pasan, los contrincantes se analizan, el espectador todo eso en tensión, y finalmente se produce el disparo. En resumen, lo que cualquiera puede hacer de cualquier manera Leone lo transforma en poesía hecha imágenes.

Cuando se trata de escenas "míticas" , escenas llamativas por la emoción, tensión, etc que desprenden, Leone es uno de los mejores (algo que aprendió y muy bien su discípulo del siglo XXI Quentin Tarantino, aprovecho para citar una frase de mi profesor de literatura sobre el cine de Tarantino: "Te gusta Tarantino pero no lo entiendes... no puedes entenderlo si no has visto antes a Leone, entiende a Leone y entenderás a Tarantino"), y aunque es en "El Bueno, el feo y el malo" donde alcanza el clímax, "La Muerte Tenía Un Precio" tampoco anda escasa de estos momentos. Cualquiera que la haya visto recordará la escena de presentación de los cazarrecompensas al comienza del film, en la que se ve como cada uno atrapa a un fugitivo, observándose sus métodos de caza tan diferenciados; o la escena en la que ambos se vuelan mutuamente los sombreros a tiros. Aunque sin duda, como en el resto de películas de la "Trilogía", la escena clave es el clímax final, los famosos duelos finales de Leone tan alabados, homenajeados (y parodiados también), que aquí se muestra en todo su esplendor con una secuencia de cuatro minutos de duración en la que los tres personajes principales intercambian algo más que disparos.

Algo que tiene Leone que no tienen otros directores es que sabe definir muy bien los personajes. Así en esta película tenemos al villano sanguinario pero lleno de remordimientos por sus acciones pasadas (el Indio), al justiciero (Mortimer) y al antihéroe ("El Manco"). Y es que una vez más Clint Eastwood demuestra que él es el único pistolero solitario del oeste americano. Su interpretación no podía ser de otra forma, él es el hombre sin nombre, un personaje que ha pasado a los anales del cine. El mismo revolver, el mismo sarape usado y reusado, la misma expresión, el mismo cigarro liado. Eastwood es y será siempre el pistolero del western, el protagonista perfecto para una película del oeste. Porque Eastwood no interpeta, es él mismo. No hay más que decir.

Aunque en mi opinión, esta no es su película, es la de Lee Van Cleef, que muestra que puede hacer papeles tanto de bueno como de malo con la máxima corrección posible, demostrando así ser uno de los mejores actores de western que hayan existido. Su interpretación no se puede definir de otra manera que magnífica, colosal, enorme. Cuando Lee Van Cleef aparece en pantalla, todo lo demás existente en la secuencia parece perder importancia, porque él es el centro de la escena. El personaje de Mortimer es uno totalmente distinto al de Eastwood, mientras uno es rápido y mortífero, el otro es meticulos, frío y calculador, y eso se muestra sobre todo en la escena inicial en la que el hombre al que persigue le dispara repetidas veces, fallando por supuesto, mientras el monta su revolver con total parsimonia. En resumen, Lee Van Cleef está mejor que nunca aquí, consiguiendo lo que es casi imposible, restarle protagonismo a Clint Eastwood.

Gian Maria Volonté está tambien fenomenal en el papel de El Indio, demostrando que sabe hacer algo que sólo actores como Jack Nicholson; Anthony Hopkins o Heath Ledger han conseguido: saber interpretar a un demente. Porque El Indio está loco pero aún así también es un ser humano y tiene conciencia, y remordimientos, y esos contrastes en el caracter del personajes son mostrados por Volonté de una manera soberbia que ya querrían muchos actores actuales.

Buena historia, buenos personajes, buena dirección ¿que es lo que hace falta para completar una buena película?, os lo diré: una buena banda sonora. Algo que a cualquiera le viene a la mente cuando oye el nombre de Ennio Morricone, genial compositor y una inspiración para mi. Morricone y Leone trabajaron juntos repetidas veces, creando así algunas de las bandas sonoras más recordadas de la historia del cine. Y no tengo nada más que decir sobre esto.

En resumen, "La Muerte Tenía Un Precio" es una grandísima película que tiene todos los ingredientes necesarios para que una película tenga un éxito asegurado. Sin embargo, es ligeramente inferior a su hermana mayor, "el bueno, el feo y el malo" (una de mis 10 películas favoritas), así creo que es justo que si para mí "El Bueno, el feo y el malo" tenga un diez, esta tenga un 9. Así pues, dejaos llevar por los aires del western en los que una vida valía más que el oro y disfrutad de una de las mejores historias del oeste jamás contadas.

Y ahora que he terminado de contar todo esto, recoge tu revolver... cuando la música de este reloj pare dispara...si eres capaz...BANG¡¡



RECOMENDADA a fans del spaggueti western, seguidores de clint eastwood, a todo el que quiera volver a los tiempos del western americano, a aquellos que quieran ver una película sublime y a aquellos que no también.